jueves, 8 de enero de 2015

1er Editorial de 2015

Llegó el año 2015.
Eso, por supuesto no es ninguna noticia, ningún tubazo ni es un anuncio importante, lo que si es importante es que reciban de parte nuestra, un próspero y feliz 2015, que ya de por sí pinta bastante difícil para los venezolanos, porque les toca vivir con la inflación más alta del continente, con niveles de delincuencia e inseguridad desbordados, puesto que para la publicación de este editorial, en lo que va de año han ingresado a la morgue de Bello Monte en Caracas 96 cadáveres producto de las muertes violentas que gracias al régimen, nos coloca entre los países más violentos del mundo.
Mientras en Francia lloran la pérdida de 12 personas víctimas del fundamentalismo islámico, acto que rechazamos categóricamente, en Venezuela recordábamos con tristeza cómo la impunidad y delincuencia hacían de las suyas pues se cumplía un año del asesinato de Mónica Spear y su esposo, suceso que conmocionó a la nación.

Venezuela inicia el 2015 con una caída abrupta en los precios del petróleo, la caja chica del chavismo, con el cual se ha despilfarrado el equivalente a quince planes Marshal para la compra de voluntades a nivel nacional e internacional, que es PDVSA se está agotando, sumado a ello, los inventarios se encuentran en números rojos, la escasez es alarmante y la gente está cansada de perder su vida en una cola para pelearse por un pollo.
Basta con revisar los anaqueles de los supermercados y usted encontrará una larga fila de personas buscando cualquier tipo de producto.
El trending topic de la red social Twitter #AnaquelesVaciosEnVenezuela estuvo de primero en este país y durante varios días, las redes de supermercados han prohibido tomar fotografías de los anaqueles, y se ha desatado una fuerte controversia sobre la censura en un país que se informa gracias a redes sociales, porque sus medios de comunicación convencionales están al servicio del régimen.

La imagen de personas haciendo cola es algo a lo que el régimen asesino de Hugo Chávez y Fidel Castro han acostumbrado a este pueblo, pero el hecho de acostumbrarse no quiere decir que ello sea normal. Esta imagen es afín a todos los rincones donde se haya impuesto el socialismo, ya que genera escasez y pobreza.
Como 2015 es un año nuevo, pues decidimos en la redacción presentar con este editorial una nueva sección la cual llamamos "la foto", la cual presentamos a continuación:


La imagen es de una pintura que lleva por título "la cola", de Alexei Sundukov, nacido en Rusia durante la cruenta dictadura soviética que gobernó por casi 8 décadas casi 1/3 del territorio mundial, en donde, al igual que en Venezuela, se veían largas filas de personas haciendo lo mismo que hacen los venezolanos hoy día: Colas interminables por cualquier bien de primera necesidad.


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